Prepararse para el taller
Normalmente, el taller posterior a la puesta en marcha suele llevar entre 1 y 2 horas en realizarse. El tiempo podría variar según la complejidad del proyecto, el ámbito del evento de puesta en marcha y los problemas que aparezcan durante la implementación.
Antes de comenzar con el taller posterior a la puesta en marcha, los participantes deberían estar familiarizados con su estructura y los tipos de temas y requisitos previos a tratar.
El requisito previo central para la preparación es la plantilla del taller posterior a la puesta en marcha, que captura información sobre las secciones presentadas (como los objetivos del proyecto, las lecciones aprendidas, etc.). El equipo de implementación debe completar y compartir la plantilla con el arquitecto de soluciones, al menos dos días hábiles antes del taller. Esencialmente, el taller posterior a la puesta en marcha es una conversación. No pretende ser un cuestionario que se pueda rellenar y revisar en modo sin conexión.
Además, tener listos los siguientes artefactos del proyecto enriquecería los intercambios durante el taller:
Carta del proyecto: documento que proporciona los antecedentes del proyecto, especialmente los objetivos y los resultados clave esperados.
Plan/cronograma de implementación con las fases siguientes: documento o diagramas de Gantt que muestran las siguientes fases en el viaje de transformación digital.
Proceso de soporte técnico/ruta de remisión a una instancia posterior: apoya a los niveles y a los propietarios en los nuevos incidentes en marcha.
Matriz de asignación de responsabilidades de soporte: tabla de tareas de soporte técnico, servicio y mantenimiento, y roles relacionados con estas tareas. Estas relaciones generalmente se asignan a través de una clasificación ERCI de encargado, responsable, consultado e informado.
Esta lista de los entregables del proyecto no es exhaustiva. Pero es beneficioso compartir estos entregables o tenerlos listos para mostrar durante el taller posterior a la puesta en marcha.